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Canal: Emprendedor

Cobrar Bien por mi Trabajo o Producto

Cobrar Bien por mi Trabajo o Producto

Cobrar Bien por mi Trabajo o Producto
He conocido varios emprendedores con ideas de negocio altamente rentables, pero les falta la confianza necesaria para cobrar lo que se merecen por sus bienes o servicios; terminan devaluándose para “no quedar mal” con los prospectos. Además, temen ser rechazados si suben sus tarifas. Pero la verdad es que hay una correlación directa entre lo que cobras y el valor percibido de lo que produces. Recuerda que el precio es una cuestión de percepciones; si los precios son demasiado bajos, muchas personas lo interpretarán como que es de poco valor (calidad) y se alejarán.

Aquí hay cuatro razones por las que muchos emprendedores no cobran lo que se merecen y por qué tú necesitas superar el miedo y tomar confianza para subir tus precios.

1. Centrarse en el proceso y la cantidad de tiempo que pasas con tus clientes. En su lugar, tienes que fijarte en el valor que les estás proporcionando. Tus clientes no ven la cantidad de tiempo que pasas con ellos, sino en lo que haces por ellos. Si consiguen los resultados que deseaban y perciben el valor de lo que están pagando, estarán satisfechos.

2. Establecer tus precios basándote en la competencia. Esto no siempre es una buena estrategia ya que un alto porcentaje de las empresas fracasan en los primeros cinco años. Si vas a copiar los precios de alguien, mira a los que están en la cima y analiza lo que han hecho para conseguirlo. Recuerda que eres único, puedes emular a tu competencia, pero personaliza el modelo para adaptarlo a tu situación.

3. Tratar de comparar tu presupuesto con los de tus clientes potenciales. Todos somos diferentes y nadie tiene exactamente el mismo presupuesto y prioridades que tú. Tu presupuesto mensual para entretenimiento puede ser relativamente bajo y que prefieras lo económico, pero para tus clientes potenciales puede ser lo contrario. Estudia el comportamiento de tu mercado objetivo.

4. Creer que tú o tu producto no tienen las características suficientes para justificar una subida de precio. Solemos decir que subiremos nuestros precios al tener más años de experiencia, al obtener otro grado, o cuando podamos ofrecer algo mejor. Lamentablemente esa subida de precios parece que nunca llega. Hay otro tipo de valores agregados (beneficios) que puedes ofrecer para justificar tu aumento de precios.

Finalmente, tus clientes están buscando una cosa: pasar del problema a la solución. Tus clientes aceptarán un aumento de precios si ellos perciben que recibirán más beneficios.
Cómo Construir una Marca Personal

Cómo Construir una Marca Personal

Cómo Construir una Marca Personal
Continuando con el tema del artículo anterior, una de las mejores inversiones que puedes hacer en tu vida es invertir en ti. Seas empleado, trabajador independiente, empresario, estudiante o recién egresado, dedica tiempo a construir tu marca personal, que esta te abrirá muchos caminos que antes parecían inaccesibles. Hay varios pasos claves para construir con éxito tu marca personal:

1. Investiga y define

La gestión de tu marca debe estar basada en un plan. Primeramente debes reconocer quién eres y tus competencias, y definir tu misión, visión, objetivos y valores. Analiza a tu público para saber cómo eres reconocido ante ellos y para identificar sus necesidades y deseos; analiza a la competencia para diferenciarte de ella. Una marca sólida con una propuesta única de venta te hará sobresalir, te da una ventaja sobre muchos.

En "¿Qué es la Marca Personal?" comenté que cada acción que tomas refuerza o debilita tu marca. Piensa en el mensaje que quieres transmitir a los demás; tu pensamiento y tu comportamiento deben reflejar tu mensaje.

2. Crea tu logotipo

Una vez que determines tu marca personal, es hora de definir tu logotipo. El logo es importante ya que es una representación de tu marca, evoca percepciones y emociones. Piense en un logotipo sencillo, claro y discreto con el que te gustaría que se te asocie. La mayoría de las personas optan por utilizar una pequeña figura geométrica, sus iniciales o simplemente su nombre en una fuente en particular como su logotipo de marca.

Independientemente de qué tipo de logo prefieras, este lo usarás en todo momento. Debe formar parte de tus perfiles de redes sociales, página web, hojas membretadas, CV, tarjetas de presentación, firmas de correo electrónico, etc. El fin es que la gente reconozca tu logotipo, y por ende, tu marca y tu nombre.

3. Desarrolla tu reputación

Un buen sitio web personal es una excelente carta de presentación; crea uno vinculado a tu nombre. Es más barato y más fácil de lo que muchos piensan. Tus clientes potenciales y empleadores buscarán tu nombre para recoger información sobre ti, tu personalidad, historia profesional, educación, etc. Después de todo, nos gusta buscar y saber más sobre las personas que queremos impresionar o conocer mejor.

Construye una marca sólida con acciones online (publicaciones, comentarios, fotos y videos) y offline (eventos, grupos, asociaciones) que promuevan tu misión personal, destaquen tus logros profesionales e ilustren tus metas para el futuro. Sé siempre participativo y abierto.

También es importante que te protejas contra todos los factores negativos que influyen en tu marca. Elimina o limita el acceso al contenido que no sea acorde con lo que quieres transmitir. Realiza una búsqueda en Internet sobre tu nombre, corrige y actualiza aquello que sea posible.

4. Escribe un blog

Encuentra algo que te interese y escribe sobre ello. No tiene que ser ser una obra de arte, pero sí debe ser una publicación breve y concisa que informe al lector sobre algo que tu sabes. Esta es tu oportunidad de expresar algo de personalidad, que la gente vea otros lados de ti. Pero te advierto, ve a lo seguro; evite temas controvertidos en tu blog con el fin de limitar el riesgo de ofender a las personas. A menos que sea importante para su carrera, no toques temas de política o religión.

Un blog es una fuente de información para tus conexiones, te establece como un conocedor, y te mantiene en la mente de las personas. Además de los beneficios externos, escribir un blog te obliga a mantenerte actualizado de los temas actuales, desarrolla tus habilidades de escritura, y proporciona un nivel de disciplina. Cada que publiques un artículo, compártelo en tu web y redes sociales. Si la plataforma de tu blog se encuentra dentro de tu misma página web, mucho mejor.

Ahora que ya tienes definida tu marca, creaste tu logotipo y desarrollaste tu sitio web y blog, has completado los primeros pasos para crear una marca. En adelante, piensa que todo lo que haces influye en tu marca personal; actúa acorde a ella y todo irá bien.
¿Qué es la Marca Personal?

¿Qué es la Marca Personal?

¿Qué es la Marca Personal?
¿Qué es una marca? Los profesionales de marketing tienen diferentes respuestas para esta simple pregunta. Algunos definen una marca como un nombre, término o símbolo que se utiliza para identificar un bien o servicio de otro. También se dice que una marca es una promesa de satisfacción y calidad. Otros la definen como un conjunto de activos vinculados que aportan valor añadido al usuario final. Una marca fuerte produce opiniones, emociones y respuestas fisiológicas en las personas.

Con todo esto, podemos decir que una marca es una colección de percepciones diseñada para influir en el cliente o consumidor final. Por lo tanto, así seas un importante ejecutivo de un corporativo regional, el dueño de una pequeña empresa o un recién graduado universitario, tener una marca personal fuerte puede ser la diferencia entre el éxito y el fracaso, entre obtener un trabajo o no.

El objetivo de construir una marca personal (personal branding) es desarrollar una percepción positiva de la persona. Rasgos como la honestidad, la confianza, el conocimiento, el entusiasmo y la experiencia son importantes en nuestra marca. A medida que la formes, piensa en tus fortalezas y debilidades, en los que eres bueno y en lo que quieres distinguirte.

Tu marca es la base de todas tus actividades de marketing. Al igual que los cimientos de una casa tienen que ser sólidos para sostener la edificación, los cimientos de tus estrategias de mercadotecnia también deben serlos. En otras palabras, tu marca debe ser la realidad de lo que eres y lo que pretendes lograr.

Con una buena marca personal se crea una identidad que resuena en los superiores, posibles empleadores, empleados, clientes, seguidores y demás. Tu marca debe formar relaciones emocionales con la gente a la que intentas llegar. Esto es importante porque muchas veces las personas no adquieren productos o toman otras decisiones basados en la lógica, sino que a menudo actúan a partir de sus emociones y percepciones; te preferirán a ti debido al vínculo emocional.

Tu marca personal debe actuar como una brújula interna que conduzca a todos tus actos por la dirección correcta. Cada acción que tomes refuerza o debilita tu marca. Factores como la ropa que te pones, tu lenguaje corporal y la forma de manejarte en grupo van definiendo tu marca. Es importante que estos sean acordes a lo que quieres comunicar a los demás.

En el próximo artículo explicaré los pasos para que comiences a construir tu marca personal.
Cuatro Consejos para Ser un Mejor Escritor

Cuatro Consejos para Ser un Mejor Escritor

Cuatro Consejos para Ser Mejor Escritor
La escritura es una tecnología profundamente interiorizada en el ser humano. Tan así, que la consideramos algo completamente natural y de uso diario. Sea que escribamos nuestro nombre, un poema, un correo electrónico, una actualización en Facebook o un artículo, estamos comunicando algo. Esta comunicación puede trascender en el tiempo, incluso después de nuestra muerte, por esto puede ser un instrumento poderoso si se usa correctamente.

Saber escribir bien nos ayuda a lo largo de la vida. Además de la obvia utilidad académica y laboral, leer y escribir estimula la creatividad y la disciplina, características importantes para cualquier líder y emprendedor. Nunca es demasiado tarde para retomar el arte de la escritura y convertirse en un buen publicista, articulista o novelista, sin embargo, requiere mucha dedicación. Sigue los siguientes consejos para que logres convertirte en un escritor prolífico:

1. Establece tu meta e investiga

Antes de comenzar a escribir algo, debes saber lo que quieres transmitir y a quién. Si estás enfocado y tienes un objetivo en la mente, es muy probable que termines con un buen escrito. Piensa si el fin de tu texto es enseñar, convencer, construir una relación, vender, transmitir emociones, etc. Una vez que determines su fin, investiga para recabar información útil que apoye tu mensaje.

2. Sé tu mismo

Si tienes que pensar demasiado antes de escribir, entonces no es tu propio estilo de escritura. Mantén la calma y trata de que tus pensamientos fluyan. Cuando intentas copiar un estilo particular, terminas cometiendo más errores. Una buena escritura debe ser el reflejo de tus ideas, pensamientos y razonamientos. Puedes pedir a una persona de confianza que revise tu trabajo y hacer los cambios necesarios. Sin embargo, al final, tu escrito debe reflejar quién eres.

3. No dejes de leer

Leer es esencial para escribir bien. Haz de la lectura de libros, blogs, periódicos y revistas un buen hábito para mantenerte actualizado. Con el tiempo, serás capaz de distinguir entre buenos y malos estilos de escritura. Además, esto mejorará tus propias habilidades para redactar.

Por otra parte, nada puede motivar a un buen escritor como leer los textos de otro. Si te quedas sin palabras para expresar una idea, significa que no estás leyendo ni sabes lo suficiente sobre el tema.

4. Nunca te rindas

Y por último, aunque no menos importante, nunca te des por vencido. Ten paciencia, mantén la calma y sigue leyendo y escribiendo. Todos los días son buenos para continuar perfeccionando tu estilo.
8 Formas de Aumentar tu Productividad

8 Formas de Aumentar tu Productividad

8 Formas de Aumentar tu Productividad
Parece que nunca hay suficiente tiempo en el día para hacer lo necesario. Andamos llenos de actividades y corriendo de un lado a otro para realizarlas. Para aliviar esto, nada mejor que incrementar nuestra productividad y hacer más cosas en menos tiempo.

Sin darle vueltas al tema, a continuación te dejo 9 maneras de mejorar tu productividad laboral, úsalas sabiamente.

1. Simplemente comienza

La parte más difícil de una tarea es empezarla. No des largas ni pierdas el valioso tiempo de la mañana. Levántate al despertar, realiza rápido tus otras labores y después céntrate de lleno en las actividades de tu negocio. Este proceso debe volverse un hábito.

2. Piensa con tiempo

Una forma sencilla de lograr más cosas es sabiendo con tiempo lo que necesitas hacer. Planifica con tiempo, así sabrás distinguir las tareas importantes y las que puedes realizar en un mismo momento, así ahorrarás vueltas y tiempo.

3. Levántate y muévete

No permanezcas sentado todo el día y haciendo lo mismo una y otra vez. Toma pequeños descansos para relajar tu mente y permitir el flujo de sangre y oxígeno en tu cuerpo. Esto beneficiará en tu productividad más de lo que crees.

4. Programa tus actividades

Haz un horario detallado de tu jornada de trabajo y adhiérete a él. Esto te permite centrarte en una cosa a la vez, y sabrás con claridad si estás realizando lo que deberías estar haciendo.

5. Aprende a enfocarte

Nos distraemos fácilmente cuando tenemos Internet y otras tecnologías a la mano, especialmente si trabajamos desde casa. Aprende a dejar estos distractores de lado y enfócate en lo que es importante para ti. Al concentrarte en una sola actividad trabajarás mejor para sacarla adelante.

6. Averigua cuándo eres más productivo

Hay ciertos momentos del día en que algunas personas son más productivas, puede ser al despertar, en la tarde, en la noche, después de comer, etc. Descubre por ensayo y error tu mejor momento, así sabrás lo que te funcione y podrás acomodar tus tareas en relación a esto.

7. Duerme bien

Asegúrate de dormir por lo menos 8 horas cada noche. Cuando no duermes lo suficiente puedes ponerte malhumorado, desmotivado, y tener pérdida de memoria.

8. Mantente motivado

Hay decenas de maneras de motivarte, desde viendo un video, escuchar una canción, dar un paseo por un parque o simplemente reevaluando tus metas y lo que quieres lograr.
Equilibrio entre la Vida Laboral y Personal

Equilibrio entre la Vida Laboral y Personal

Equilibrio entre la Vida Laboral y Personal
Ser dueño de una pequeña empresa puede ser una experiencia muy gratificante, pero también suele poner presión a las otras áreas de tu vida. El estrés, los conflictos y el fracaso para equilibrar la vida personal y profesional son temas muy recurrentes entre los emprendedores y empresarios. Estos problemas tan desgastantes se pueden evitar al equilibrar los tiempos entre la familia, el trabajo, el ocio, los planes personales y demás áreas.

Hablar de mantener un equilibrio entre estos distintos aspectos de la vida puede parecer un tema simple, pero en realidad es ciertamente complejo. Debes analizar y reflexionar sobre algunos puntos que pueden llevarte al fracaso en el camino a organizar tu vida. Uno de ellos es tener expectativas poco realistas sobre el tiempo que te llevará alcanzar el equilibrio. Otro es subestimar la complejidad actual del trabajo, la vida, y todas las demás piezas que componen la vida profesional y empresarial de hoy. En tercer lugar, la visión simplista de que el equilibrio es puramente una asignación de tiempos. Y, por último, conocer tus prioridades, necesidades y definición de éxito para conformar un balance adecuado.

El hecho es que el equilibrio entre la vida laboral y personal no puede ser moldeado en una fórmula prescrita. Para ilustrar este punto, supongamos por un momento que el balance balance perfecto significa pasar 1/3 de su vida en cada una de estas áreas: trabajo, personal, y dormir. Es probable que te sientas muy decepcionado contigo mismo cuando trates de llevar esta ecuación a tu vida. Tan pronto como un cliente importante requiera unas 12 horas diarias, la ecuación no funciona y viene la frustración. Añade a este desafío la forma en que defines ciertas áreas de la vida. ¿Cocinar y limpiar la casa son trabajo o parte del área personal? Para una persona, preparar la cena claramente podría caer en trabajo, pero para otra, es la forma en que se relaja al final del día.

Como puedes ver, lo que constituye el éxito de este proceso es intensamente personal. Alguien puede ser muy apasionado sobre su trabajo y no desea mucho tiempo personal, siempre y cuando sus relaciones primarias se mantengan, mientras que para otra persona el trabajo acaba a las 5:00 p.m. y punto. Algunas personas prosperan cuando integran su trabajo y vida de cerca, mientras que otras prefieren límites claros entre los dos. Para algunos el ejercicio es una parte importante de su salud y tiempo personal, mientras que otros necesitan tiempo a solas, o tiempo para dedicarse a sus pasatiempos u otros intereses. Algunas personas tienen horarios de trabajo consistentes y predecibles, para otros las demandas de tiempo pueden variar mucho de una semana a otra.

Lograr un buen equilibrio en tu vida tiene que ver con la personalización y flexibilidad. Sigue estos consejos para determinar lo que necesitas para lograrlo:

Claridad. Define lo que un buen equilibrio significa para ti. ¿Cuáles son tus objetivos laborales y tus metas personales? ¿Qué es lo importante para unirse de una manera significativa con la familia y amigos? ¿Qué más necesitas para construir un buen equilibrio? ¿Qué aspectos no modificarías pese a que surgieran otras prioridades?

Flexibilidad. Ten en cuenta las realidades de tu trabajo, las circunstancias de la vida, y los tipos de semanas que tiendes a tener, desde las fáciles a las muy estresantes. ¿Qué tipo de situaciones siempre surgen, y cómo te puedes adaptar a ellas? Identificar estas situaciones y planifica a futuro para que puedas programar tu horas de trabajo y compromisos personales en consecuencia.

Revisión. Tu vida personal, familiar y las necesidades de trabajo van a cambiar con el tiempo. Revisa y cambia tus planes según sea necesario para asegurarte de que están acordes con tus metas.

Si quieres equilibrar tu vida laboral y personal debes tener en cuenta tus valores, preferencias, necesidades personales, las obligaciones en tu empresa, y tu propia definición de éxito. El equilibrio puede ser alcanzado y mantenido con la perspectiva correcta y con una buena planificación. Contagia este balance a tus trabajadores y tendrás un camino menos pedregoso al éxito.
Supera los Bajones Emocionales

Supera los Bajones Emocionales

Supera los Bajones Emocionales
En el artículo anterior mencioné algunos consejos para mantenerte motivado y conectado con tu negocio para llegar al éxito. Hoy daré seguimiento a este tema, pero tratando sobre lo que debes hacer cuando la caída emocional es más profunda de lo que tenías previsto. Puedes identificar estas bajas emocionales cuando llegas a sentir que todo el mundo está en contra tuya, o que por más que hagas, todo sale mal en tu empresa, o puedes incluso llegar a dudar de si ese negocio es realmente para ti.

Manejemos un ejemplo: Después de unos días de éxito y estar motivado, pierdes el control cuando una cuenta tuya se va con la competencia. Después de este tipo de eventos te puedes sentir desorientado. El problema viene cuando te encierras en la situación y comienzas a hundirte emocionalmente debido a un sentimiento de fracaso, lo que te vuelve incapaz de seguir trabajando y te puede acarrear a problemas más severos como la depresión clínica.

Si te encuentras en un bajón emocional, no debes permanecer allí mucho tiempo, es necesario que encuentres una salida tan pronto como sea posible. Puede que no sea fácil y que tardes más de lo que quisieras, pero siempre puedes salir de esos estados negativos.

Mis sugerencias para salir del ciclo y volver a la estabilidad son: Sal a caminar o correr, golpea una almohada hasta que no puedas más, toma una siesta, pasa un buen momento con tu mejor amigo o con la familia, mira tu película favorita o lee tu libro preferido, come un buen platillo en un gran restaurante, toma un paseo, ve al parque o a la playa y disfruta del entorno, pasa un buen momento contigo mismo y reflexiona sobre dónde estás, a dónde quieres ir y cómo vas a lograrlo.

La lista puede seguir y seguir, pero la idea es encontrar una manera de romper el ciclo que ocasiona tu frustración y poco a poco volver al trabajo. Tu negocio te necesita, al igual que tus empleados y clientes. Puedes hacerlo, todos podemos. Éxito.