Estar preparado para las contingencias en tu negocio puede significar la diferencia entre el éxito y el fracaso. Es muy difícil para un empresario estar preparado para todas las eventualidades, pero es algo a lo que debemos aspirar. Ha llegado el momento de desarrollar un plan de contingencia para tu negocio. Lo primero que debes hacer es enumerar todos los posibles problemas que se pudieran presentar, por ejemplo: desastres naturales, renuncia de un trabajador clave, deterioro de tu salud, pérdida de un cliente importante, mal funcionamiento de un equipo vital, incendio, robo de identidad, etc.
Tu plan de contingencia debe cubrir estas y cualquier otra cosa que pueda suceder. Trata de pensar en todos los problemas posibles para que puedas planificar soluciones para cada uno. A continuación te enumero algunos consejos que pueden ayudarte a solucionar algunos problemas:
1. Ten un seguro adecuado para tu negocio. Cubre las áreas basado en lo que puedas permitirte. Asegúrate de entender los términos y la política.
2. Ten un respaldo para cada función necesaria. Mantén empleados capacitados para ejercer en otras áreas. Describe detalladamente las funciones de cada puesto.
3. Mantén una reserva de dinero de al menos 3 meses de operaciones. Esto permitirá combatir emergencias y es un colchón para cuando no hay flujo de efectivo.
4. Ten un plan de evacuación. Si hay un incendio, un sismo o un derrame de sustancias químicas, todos los empleados y clientes sabrán cómo ponerse seguros. Capacita a tus empleados y haz simulacros.
5. Ten una plan de recuperación de datos. La información es vital para las empresas, evita que esta se pierda. Protege tus datos, software y hardware críticos para el funcionamiento de tu negocio.
Dedica tiempo a armar tu plan, involucra a tus trabajadores y espera que nunca tengas que usarlo. Éxito.