Los problemas son parte de los negocios. De hecho, unas de mis actividades favoritas son solucionar los problemas y encontrar soluciones creativas para los negocios de mis clientes. Los problemas también son parte de la vida. Ellos son los que nos impulsan hacia adelante y nos ayudan a crecer, aprender y ver nuevas oportunidades.
El problema con los problemas es que muchos empresarios se centran en ellos y simplemente no los solucionan. A veces pueden pasarse años dándole vueltas a sus obstáculos, cuando lo que tendrían que hacer es cambiar su forma de pensar y tomar nuevas direcciones.
Aquí te presento una forma en que puedes comenzar a resolver tus problemas en 10 minutos o menos.
1. Deja de centrarse en el problema y sólo en el problema. Identifica lo que deseas cambiar. Por ejemplo, la preocupación podría ser: "No tengo suficientes clientes en este momento y no tengo el dinero para gastar en marketing" o "mis clientes no tienen el dinero para gastar en mis servicios". Bueno, ya has identificado el problema.
2. Hazte la pregunta correcta. Transforma el problema en una pregunta: "¿Cómo puedo atraer más clientes con estrategias de marketing de muy bajo costo?" O "¿cómo puedo atraer a nuevos clientes que entiendan el beneficio de mis servicios y pueden pagarlos fácilmente?". Cada vez que haces una pregunta tu mente comenzará a encontrar respuestas. Inténtalo ahora mismo, hazte una pregunta y luego escucha cómo tu mente comienza inmediatamente a buscar respuestas. Así, en lugar de centrarse en el inconveniente y repetir una y otra vez lo mismo, haciéndote la pregunta correcta comenzarás a resolver los problemas de tu negocio.
3. Empieza a trabajar en la solución. Ahora que las respuestas están viniendo a tu mente, elige las que sientas útiles y ponlas en práctica. Si todavía no encuentras la respuesta correcta, sigue buscando hasta que la tengas. Pida ayuda, consulta con otros empresarios, con tus empleados o con los mismos clientes hasta que encuentre la solución adecuada.
A veces podemos quedar atorados en nuestros problemas y hundirnos con ellos. La clave es hacer que te emocione (así como a mí) buscar soluciones y apegarte a encontrarlas rápido y aplicarlas de inmediato.
Lograr el éxito es toda una aventura, un gran proceso, y te sorprenderás por la persona en que te conviertes mientras te cultivas en ese proceso.